Quizá sea que se hace mayor y añora los tiempos del "menú feliz". Tal vez se hace mayor y piensa en el "siguiente plato". Crecen, Pito, y lo quieren hacer a toda prisa.
Y son estos retratos, pausados, donde una mirada brillante y perdida, nos enternece y hará que un día nos pase como reza la letra de "Pequeñas cosas" de J.M. Serrat.
A mí me gustan esas miradas entre perdidas y pensativas. Pero cuando veo una de estas tomas me quedo igual, con la vista en el infinito contemplando la escena.
Nota: Habrá que intercambiar estrategias sobre "practicas de tiro" ;D (que luego se cogen confianzas, se te sientan en tu sillón y se te beben la cerveza y el coñá) ;D