Este año la salida larga de Otoño fue a la selva de Irati en Navarra. Aunque frecuentaba el Pirineo Navarro cuando estaba trabajando por Vizcaya, no conocía demasiado esta zona y decidí apuntarme a uno de los talleres que , con un fotógrafo local, organiza todos los años Fotonatura.org. Aunque este año el otoño no fue especialmente colorido comparado a otros años (según nos comentaron los guardas del parque) disfrutamos conociendo el entorno con la comodidad que proporciona el que te lleven a las localizaciones que mas interés pueden tener desde el punto de vista fotográfico según este el día.
La mañana del sábado, buscando una niebla que no apareció, subimos hasta las cercanías del Puerto de Larraun y nos dedicamos a hacer fotos del bosque desde la ladera opuesta (tirando de teleobjetivo).
Después de comer en las Casas de Irati, nos adentramos en el bosque buscando setas y fotografiar el bosque ya desde dentro.
Al regresar al pueblo de Ochagavía, donde teníamos el Hostal, al grito de "Foto rápida" del profesor, toco sacar de nuevo los trastos para aprovechar la "hora azul" y los reflejos que el pueblo ofrecía en el río que lo atraviesa.
Al día siguiente regresamos a por las "nieblas" que habían quedado pendientes y, esta vez si hicieron acto de presencia por el Valle de Salazar
Un agradable fin de semana en unos parajes que recomiendo y buena experiencia la del taller también, si se desconoce la zona y no se tiene el tiempo suficiente de patearla es la mejor manera de aprovechar el viaje.
Saludos
La mañana del sábado, buscando una niebla que no apareció, subimos hasta las cercanías del Puerto de Larraun y nos dedicamos a hacer fotos del bosque desde la ladera opuesta (tirando de teleobjetivo).
Después de comer en las Casas de Irati, nos adentramos en el bosque buscando setas y fotografiar el bosque ya desde dentro.
Al regresar al pueblo de Ochagavía, donde teníamos el Hostal, al grito de "Foto rápida" del profesor, toco sacar de nuevo los trastos para aprovechar la "hora azul" y los reflejos que el pueblo ofrecía en el río que lo atraviesa.
Al día siguiente regresamos a por las "nieblas" que habían quedado pendientes y, esta vez si hicieron acto de presencia por el Valle de Salazar
Un agradable fin de semana en unos parajes que recomiendo y buena experiencia la del taller también, si se desconoce la zona y no se tiene el tiempo suficiente de patearla es la mejor manera de aprovechar el viaje.
Saludos