WHOddEN
Gurú Olympista
Buenas, esta imagen tiene más historia de la que aparentemente parece. Regresando a la orilla tras estar un buen rato merodeando por los arrecifes, justo en el límite del banco de arena con el veril, observé a este ejemplar de pez araña (Trachinus draco) con la mandíbula desencajada. En un principio pensé que estaba devorando a una presa, por lo que me apresuré a captar el momento, pero me dí cuenta enseguida que lo que le sobresalía de la boca era un anzuelo unido al sedal de un pescador que aún no había recogido el sedal. Al verme, el animal optó por su conducta defensiva más común: enterrarse en la arena dejando sólo la cabeza y los ojos a ras del fondo. De hecho, se puede ver parte de la mandíbula desencajada por el anzuelo que la atrapaba. Aunque muchos esperais que lo hubiese liberado, no lo hice, a pesar de planteármelo. El motivo es sencillo: el sedal estaba tendido en una zona donde la pesca está permitida y liberar o no al pez era decisión del pescador y no mía. Otro motivo son las espinas venenosas que esconde este pez en los opérculos y la aleta dorsal. Además, ir cortando sedales por el fondo en una zona donde los cañeros y los buceadores compartimos un espacio muy cercano es comprar papeletas para tener un problema en la orilla al salir del agua. de todas formas, aquí teneis la instantánea:
