aristharcus
Principiante
Acabo de presentarme, y ya allí comentaba que dentro del mundo de lo digital, aparte de la E-30 tengo una D700 de Nikon y un 60D de Canon. Curiosamente con la que más disfruto es con la E-30.
La D700 da una calidad de imagen excelente. Con ella utilizo solamente objetivos Nikkor AF-D, en las focales de 20, 24, 35, 50 y 85mm. El 20mm no va muy bien con esta cámara, o al menos no tan bien como con los otros que tengo. La cámara la veo ideal para “street-photo” y de las tres que comento es la que mas me recuerda al manejo de una cámara de película. Por ejemplo, para mi el poder ajustar el diafragma en el anillo del propio objetivo es un verdadero placer (llevo haciendo fotos desde el año 74).
Lo negativo de la cámara es el peso. Con las ópticas de focal fija no llega a ser problema, pero a poco que le pongamos un zoom de calidad se me hace molesta. Y tirando de focales fijas, siempre me trae mosca el tema de que se meta polvo en el sensor, cosa que me quita placer al salir a hacer fotos.
La 60D es otra muy buena cámara. Con ella solo tengo tres objetivos: un EF 50mm f/1,4 y dos zooms: El 17-40mm f/4L y el 70-200mm f/4L no estabilizado. Este último objetivo es excepcional y es la razón por la cual me metí en el sistema Canon. Sin embargo el 17-40mm se me queda largo por la parte angular y corto por la parte tele, aún siendo un objetivo muy bueno. En otras palabras, o bien me compro un 10-22mm o bien vendo la 60D y me voy a por la 5D MkII, ya veremos. El caso es que de momento no siento plena satisfacción por la 60D.
Con Olympus tengo una larga historia. De las analógicas tengo desde la OM-1 hasta la OM-4, así que en su día compré una E-500. Mas tarde la vendí y me compré la E-510, la cual no me acababa de convencer por tres cosas: visor pequeño para poder enfocar bien con objetivos manuales de otros fabricantes, pantalla LCD que era un paso atrás respecto a la E-500 y el tema del ruido, el cual aunque mejoraba algo el de la E-500, tampoco era para tirar cohetes.
El caso es que un día se me puso a tiro una E-30 y aún sabiendo que la estrategia de Olympus parece ir por otros senderos me dije: “Qué mas da: la compro en plan colección para recordarla como parte de la gran historia de Olympus”. Aparte del Zuiko de 11-22mm que ya tenía desde la E-500, le compré el 14-54mm, el 50mm f/2 macro y el “pez” de 8mm.
Con ella no existen las preocupaciones de polvo en el sensor (las otras tienen limpiapolvos también, pero sospecho que no es lo mismo) y los objetivos son espectaculares. En cuanto al ruido, no tengo problema hasta 800 ASA y teniendo en cuenta la estabilización en el cuerpo, es como si llegase hasta 3200 ASA. En mi experiencia con eso basta y sobra. He hecho fotos con el 14-54mm a un segundo de exposición sin trípode y han quedado estupendas.
El caso es que la E-30 la tenía por casa siendo usada solo esporádicamente. Hasta estas vacaciones de verano. Decidí llevarla como cámara secundaria (mi “fotografía principal” es la analógica de carrete, con Tri-X y D76 como algo inmutable) para los días de “ir relajado”. Pues menudas fotos con las que he vuelto. Que calidad! Me llevé solamente el 14-54mm y el “pez” y los resultados han sido de primerísima categoría. Con una ergonomía en el manejo de impresión y sin preocuparme para nada del polvo en el sensor.
Creo que al menos todo el verano voy a tirar con la E-30
La D700 da una calidad de imagen excelente. Con ella utilizo solamente objetivos Nikkor AF-D, en las focales de 20, 24, 35, 50 y 85mm. El 20mm no va muy bien con esta cámara, o al menos no tan bien como con los otros que tengo. La cámara la veo ideal para “street-photo” y de las tres que comento es la que mas me recuerda al manejo de una cámara de película. Por ejemplo, para mi el poder ajustar el diafragma en el anillo del propio objetivo es un verdadero placer (llevo haciendo fotos desde el año 74).
Lo negativo de la cámara es el peso. Con las ópticas de focal fija no llega a ser problema, pero a poco que le pongamos un zoom de calidad se me hace molesta. Y tirando de focales fijas, siempre me trae mosca el tema de que se meta polvo en el sensor, cosa que me quita placer al salir a hacer fotos.
La 60D es otra muy buena cámara. Con ella solo tengo tres objetivos: un EF 50mm f/1,4 y dos zooms: El 17-40mm f/4L y el 70-200mm f/4L no estabilizado. Este último objetivo es excepcional y es la razón por la cual me metí en el sistema Canon. Sin embargo el 17-40mm se me queda largo por la parte angular y corto por la parte tele, aún siendo un objetivo muy bueno. En otras palabras, o bien me compro un 10-22mm o bien vendo la 60D y me voy a por la 5D MkII, ya veremos. El caso es que de momento no siento plena satisfacción por la 60D.
Con Olympus tengo una larga historia. De las analógicas tengo desde la OM-1 hasta la OM-4, así que en su día compré una E-500. Mas tarde la vendí y me compré la E-510, la cual no me acababa de convencer por tres cosas: visor pequeño para poder enfocar bien con objetivos manuales de otros fabricantes, pantalla LCD que era un paso atrás respecto a la E-500 y el tema del ruido, el cual aunque mejoraba algo el de la E-500, tampoco era para tirar cohetes.
El caso es que un día se me puso a tiro una E-30 y aún sabiendo que la estrategia de Olympus parece ir por otros senderos me dije: “Qué mas da: la compro en plan colección para recordarla como parte de la gran historia de Olympus”. Aparte del Zuiko de 11-22mm que ya tenía desde la E-500, le compré el 14-54mm, el 50mm f/2 macro y el “pez” de 8mm.
Con ella no existen las preocupaciones de polvo en el sensor (las otras tienen limpiapolvos también, pero sospecho que no es lo mismo) y los objetivos son espectaculares. En cuanto al ruido, no tengo problema hasta 800 ASA y teniendo en cuenta la estabilización en el cuerpo, es como si llegase hasta 3200 ASA. En mi experiencia con eso basta y sobra. He hecho fotos con el 14-54mm a un segundo de exposición sin trípode y han quedado estupendas.
El caso es que la E-30 la tenía por casa siendo usada solo esporádicamente. Hasta estas vacaciones de verano. Decidí llevarla como cámara secundaria (mi “fotografía principal” es la analógica de carrete, con Tri-X y D76 como algo inmutable) para los días de “ir relajado”. Pues menudas fotos con las que he vuelto. Que calidad! Me llevé solamente el 14-54mm y el “pez” y los resultados han sido de primerísima categoría. Con una ergonomía en el manejo de impresión y sin preocuparme para nada del polvo en el sensor.
Creo que al menos todo el verano voy a tirar con la E-30
