Está demostrado que un tipo de aprendizaje, que afecta a nuestra práctica, está en parte provocada por el descubrimiento (cuando una imagen nos gusta, nos provoca una emoción) y por el ensayo - error.
En fotografía, el conocimiento de las técnicas nos lleva al aprendizaje directo para la práctica. Otra cosa es el resultado estético. Para poder controlar el resultado estético es preciso conocer que es lo que perceptivamente nos atrae de una imagen más que otra similar, ahí es donde interviene las teorías sobre las perspectivas y composición. Estas nos permiten analizar con más o menos factores objetivos el por qué sentimos esa atracción, y cómo podemos hacer que nuestras fotos bidimensionales se acerquen la la impresión que tenemos cuando la vemos en dos dimensiones sobre el papel o la pantalla del pc.
Pero, una cosa es practicar la composición y otra el resultado, cuanto más controlas la primera, más te acercas al resultado pretendido en el momento de la toma. Al final de este rollazo, es que en ocasiones, la práctica y la cultura visual basada en la observación continua de imágenes, no lleva a tirar de forma instintiva nuestras fotos buscando una estética determinada basada en esa cultura visual.
En definitiva, lo que importa es el resultado. En este caso, no sería un buen ejemplo de lo que el texto llama tensión, pero, no por ello desmerece en absoluto el buen resultado de esta imagen.
¡¡Madre de dios!! no se os habré liado más que la pata de un romano :
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