Me preocupo por ver todas las fotos que se publican en Olympistas. Me imagino que no lo logro, pero lo intento. No comento fotos de bichos porque me causan una impresión desagradable. No comento fotos de cuestiones en las que mi ignorancia sobresale del común, por ejemplo deportes, exceptuando el automovilismo, o astrofotografía, o producto. No comento fotos que no me gustan. Y no comento fotos en ByN porque pienso que la fotografía en ByN es anacrónica, una recreación historicista en el mejor de los casos.
Pero vos, de un modo francamente desafiante me preguntaste si había visto estas fotos. Desde luego que las había visto. No las comenté porque son ByN. Pero vos querés saber. Entonces te digo.
No fotografío personas en situación de calle sino que hago, en lo que está a mi alcance, algunas cosas para aliviar el sufrimiento de algunas de esas personas. En la parroquia de mi barrio, Sagrado Corazón de Barracas, llevamos adelante lo que llamamos Proyecto duchas, en línea con lo que Papa Francisco impulsó en el Vaticano. Lo que yo hago es insignificante y no soy ejemplo de nada. Y no lo mencionaría, si no fuera que me indignó que vos llames pedigüeños a esas personas que te ofrecieron su confianza para que los fotografíes.
Vos preguntaste