París, bonita ciudad que bien se merece una misa (para aquellos que así crean) y unas vueltas fotografiando cualquier rincón. Aunque no parece la mejor hora para hacer la toma (sombras justo debajo del puente dicen que era una hora muy central del día), lo cierto es que está bien resuelta. Yo me hubiera quedado en un recorte menos alargado, haciendo que la escalera que sube desde el Sena arrancara de la esquina inferior izquierda. Así "Notre Dame" no quedaría tan en la cúspide. Por lo demás bien. Una bonita estampa recuerdo de un viaje estupendo a, en mi opinión, uno de esos sitios al que hay que ir una vez en la vida (en la medida de los "posibles").
Bueno, que pase el siguiente que seguro que se le ocurren otras cosas sobre la verticalidad y/o perspectiva o clonados de antenas y personas así como de máscaras de enfoque.
À bientôt, mon ami!