Por lo visto, el fotógrafo jura y perjura que fue natural y espontánea, pero los del museo de historia natural de Londres han decidido, después de casi un mes de investigaciones, que es de un oso hormiguero disecado que hay en el parque, así que después de darle el premio, se lo han quitado.
Es decir, que no es fácil demostrar que una foto sea "falsa". Yo creo que probablemente haya sido un chivatazo de alguien que conoce la existencia del oso, y al ver la foto premiada, se haya ido de la lengua por los motivos que sean.
¡Es que ya no saben qué inventar para sacar la foto nunca vista!